EXAMEN PARA MAESTRO
ARTESANO. EJEMPLO ZAPATEROS.
Para
acceder a la categoría de maestro, el oficial tenía que pasar por un examen que
consistía en la realización de una pieza que demostrara su conocimiento del
oficio y que se denominaba “obra maestra”. Y pagar una gran cantidad de dinero
para poder realizar la prueba.
Quienes deseaban aprender el oficio de zapatero, debían cumplir
con numerosas condiciones. Sólo podían ser aprendices aquellos que provenían
«de un matrimonio ordenado y virtuoso, tanto por parte de padre como por parte
de madre» o aquellos casados con una viuda de zapatero. Además, el solicitante
debía haber pasado 14 días en un taller de zapatería para poner a prueba su
habilidad y su talento. Tras presentar el certificado de nacimiento
correspondiente, pasar el período de prueba y pagar la tarifa del aprendizaje,
se cerraba un contrato con el maestro, cuyo deber a partir de dicho momento era
transmitir al joven aprendiz todos los trucos del oficio y cuidar de que su moral
fuera ejemplar.
El aprendizaje solía durar unos 3 años, y si no podía pagarse la
tarifa, unos cuatro años. Una vez transcurrido el período acordado y elaborada
la pieza para el examen, el oficial iniciaba un peregrinaje de seis a nueve
años para ahondar y ampliar sus conocimientos en otros talleres. Durante esos
años, el oficial pasaba un mínimo de seis semanas en cada taller; en un
documento, y posteriormente en un librito, quedaba anotado el tiempo empleado y
el comportamiento que había tenido. Al terminar el peregrinaje, el oficial
confeccionaba su pieza de maestría, con la cual demostraba a los cuatro
miembros más antiguos del gremio sus conocimientos y su habilidad. En un lapso
de ocho días debía confeccionar cuatro pares de zapatos y de botas.
Comentarios
Publicar un comentario